Tratamiento superficial donde las imperfecciones de la superficie son eliminadas del acero inoxidable mediante disolución anódica en una solución electrolítica con una corriente eléctrica impuesta. Durante el Proceso de electropulido, se aplican cargas eléctricas a los puntos altos de la superficie del metal, eliminando rebabas, bordes filosos y otras imperfecciones presentes en la superficie de acero inoxidable. Los átomos de metal son removidos rápidamente dando como resultado un efecto de nivelado de la superficie del metal. Primero se reducen los puntos altos y por último las muescas microscópicas, junto con cualquier estructura de la superficie de metal modificada mediante el Proceso de pulido mecánico, dando como resultado medidas mejoradas de la superficie.
En aleaciones como el acero inoxidable, se tiene además la ventaja adicional que al ser el hierro un metal que se disuelve fácilmente, se incrementa el contenido de cromo y níquel en la superficie, aumentando así la resistencia a la corrosión.
Electropulido
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